Hay algunas personas que nunca hacen dieta, o por lo menos dicen que no. Sin embargo, aún así tienen sus tácticas y estrategias para perder peso sin entrar oficialmente en un régimen.
Si las personas fueran capaces de incorporar estos cuatro trucos en sus hábitos alimenticios, serán capaces de entrar en el “club selecto” de quien no hace dieta.
Vea aquí los 4 trucos de la “no dieta” para que al menos lo intente!
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1. Oculte las tentaciones en tupper wares y vasos que no sean transparentes
La idea de esta receta es de ocultar las tentaciones. Si usted fuera capaz de ocultar su barra de chocolate o un paquete de galleta detrás de todo, en la última estantería, tal vez no sintiera toda esa ganas de comer una (o varias).
Esas personas que nunca hacen dieta se “auto-engañan”, no hablan “el lunes comienzo mi dieta…”, pero guardan estas tentaciones en lugares de difícil acceso, o en botes que no sean tan visibles.
Y esto no es ninguna chorrada. Mantener los alimentos a la vista hace que las personas sientan más ganas de comer a la misma hora.
De acuerdo a una investigación realizada por Brian Wansink, un especialista en dietas de los Estados Unidos que escribió el libro “Mindless Eating: Why we eat more than think” (Comer sin pensar: ¿Por qué comemos más de lo que pensamos), cuando las personas tenían más dulces guardados en frascos transparentes, comían 70% más que las que se guardaban en los botes opacos.
2. Tenga siempre algo sano listo para comer
Cuando sientas hambre, probablemente no tendrá ganas de pelar una zanahoria. Es mucho más fácil abrir un paquete de salgadinho, ¿verdad?
La pista número 2 trata de evitar este riesgo, dejando las frutas y verduras más fáciles y convenientes de comer en una “crisis de hambre” de última hora.
Para ello, lave, pele y corte las zanahorias, manzanas, piñas, entre otras muchas opciones y guárdelas en la nevera. Será mucho más fácil ocupar las en el lugar de los alimentos grasos.
“Usted tiene tres veces más probabilidades de comer la primera cosa que ve en su frente”, dice Wansik en su libro.
3. Sea minimalista
Esto significa que no se debe acumular comida como si estuviera en una guerra. Si la nevera está llena, se terminan comiendo más. Por eso lo ideal es no comprar más de lo necesario, es solo tener lo que necesita, y no a llenar con “tonterías”.
El objetivo principal es poder dejar a dos centímetros de distancia entre cada alimento guardado en la nevera, y evitar apilar las cosas.
4. Cuelgue el recibo de compra en un lugar visible
Como por ejemplo, en la puerta de la nevera. Esto funciona como una especie de inventario de las cosas saludables que usted tiene para comer, y al mismo tiempo como un recordatorio de los alimentos saludables que usted tiene en relación a los menos saludables.
No hay mejor manera para poder recordar de comer este queso de cabra orgánico con ese tomate que un recordatorio de cuánto costó?
Pruebe estos 4 trucos de la “no dieta” y verás cómo será más fácil perder aquellos libras.
