Los beneficios que el chocolate amargo ofrece a la salud son bien conocidos, y el cacao es una fuente abundante de antioxidantes que pueden proteger contra el envejecimiento y las enfermedades. Dos pequeños nuevos estudios buscaron desarrollar este conocimiento explorando cómo concentraciones específicas de cacao pueden aumentar la función cognitiva junto con la salud endocrino y cardiovascular, descubriendo que cuanto más oscuro es el chocolate, mejores son los resultados.
El estudio fue realizado por investigadores de la Universidad de Loma Linda, en California, y es considerado el primero en valorar los beneficios inmediatos para la salud del cacao altamente concentrado cuando se consume en cantidades típicas.
“Durante años, examinamos la influencia del chocolate amargo en las funciones neurológicas desde el punto de vista del contenido de azúcar – cuanto más azúcar, más felices estamos”, dijo Lee S. Berk, investigador de psiconeuroimunologia y ciencias de la alimentación en la Universidad de Loma Linda, e investigador principal en ambos estudios. “Esta es la primera vez que observamos el impacto de grandes cantidades de cacao en dosis tan pequeñas como una barra de chocolate de tamaño normal en los seres humanos durante cortos o largos períodos de tiempo, y nos sentimos alentados por los resultados”.
El primero de los estudios involucró a cinco personas que deben evitar todos los alimentos altamente antioxidantes por 48 horas antes. Ellos fueron alimentados con 48 g de chocolate amargo rico en cacao – una concentración de 70% – todos los días durante un período de ocho días.
La respuesta inmune y expresión génica de los participantes fueron analizadas a través de muestras de sangre y pruebas de ARN total, tanto en las horas siguientes como una semana después, los investigadores atentos a las citocinas pro y anti-inflamatorias.
Los investigadores observaron un aumento en la activación de células T, respuesta inmune celular y la estimulación de los genes asociados a la señalización neuronal y a la percepción sensorial, que a su vez están conectados a la hiperplasticidade – un estado en el que se cree que el cerebro es más receptivo a la memoria muscular y aprender nuevas habilidades.
En el segundo estudio, cinco voluntarios sanos recibieron de nuevo 48 g de chocolate amargo con un 70% de cacao. Su actividad cerebral fue entonces supervisada colocando electrodos en nueve lugares diferentes del cuero cabelludo y la medición de la respuesta eletroencefalográfica 30 minutos y 120 minutos después del consumo. El equipo observó actividad creciente y neuroplasticidade en regiones asociadas a la salud mental y cerebral.
“Estos estudios nos muestran que cuanto mayor es la concentración de cacao, más positivo es el impacto en la cognición, la memoria, el humor, la inmunidad y otros efectos beneficiosos”, dice Berk.
A partir de aquí, el equipo planea realizar más estudios con grupos más grandes de participantes para aprender más acerca de cómo las altas concentraciones de cacao actúan en el comportamiento del cerebro.
Los dos estudios fueron publicados en el FASEB Journal.
